lunes, 15 de octubre de 2007

Venden humo a los enfermos

Caminando por Lima esta mañana, cerca de la puerta del hospital Rebagliati, recibí un volante de los tantos que configuran la papelería peatonal de nuestra ciudad y me topé con un anuncio nocivo para los propósitos de éste blog. Se trataba de un papel que promociona los llamados "Escritos" y con ellos todo un tratamiento de limpieza espiritual, Imaginé que aquellos "escritos" debían ser una serie de moralejas al mejor estilo de los horóscopos, la brujita Josie y los libros de autoayuda que venden piratas en los puentes peatonales de la ciudad.

"¿Quieres saber que necesitas para ser feliz de verdad?", "Vencerás sabiamente con escritos", "Soluciona tu problema hoy mismo". Caray, si todo eso fuera real este sería el país de las soluciones y la felicidad. No pude evitar las ganas de llamar y molestar un rato y cogí un teléfono. 2714175, Levantó el teléfono una mujer que de inmediato se identificó: "Yo soy Mary, la del volante", me mordí un poco la lengua y enseguida le pregunté que era eso de los ESCRITOS. "Son dones proféticos, no son ni hechizos ni cartas ni males", "Por ejemplo en el amor te puedo decir si es adecuado que estes con esa chica, o que hiciste mal o bien". ¿Y donde esta escrito eso?-pregunté. - "Yo agarro un papel y me pongo a escribir y ahi te voy diciendo todo lo que debes hacer". ¿Con quien tengo el gusto?- me dijo. Le di mi primer nombre y enseguida le pregunte que cómo diablos podía saber todo eso. Soltó una risita nerviosa y me dijo : "Ahhh, es un don que tengo, es así pues , es innato" No pude evitar reirme un poco. Buscaba seguir hablándome de sus facultades mágicas pero le interrumpí con la estúpida pregunta de si es que este "servicio del amor" tenía algún costo. "Como todo"-me dijo. "45 soles por sesión" Enseguida me despedí, no quería seguir pagándole a Telefónica por seguir escuchando tales frescuras. La mujer volvió a preguntar mi nombre. "Ya le dije mi nombre. ¿Los escritos no se lo recordaron?" La mujer soltó otra de esas detestables risistas, para recobrar la seriedad y decirme: "Es que este no es un método de adivinación"

No es un "método de adivinación", es un método de robo, pura venta de humo, estafadores de oficio que esperan a algún peruano al que sólo le queden 45 soles que perder. Deberían estar encerrados, junto a los los profetas brasileros y su "Pare de sufrir". No son mas que vívoras que aprovechan para sacarle plata a los vacíos que los hombres a veces tienen, repartiendo sus avisos a las víctimas de la salud pública y otros males nacionales. Como si fueran a arreglar nuestras vidas con un lápiz y un papel.
Con ustedes, su arma:

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